La nueva etapa de Joan Laporta como presidente del FC Barcelona se presenta con varios retos importantes por delante. Desde limpiar la imagen y la corrupción del club tras el ‘Barçagate’ a solucionar el futuro de Leo Messi, pasando por sanear las cuentas o realizar algún fichaje que ilusione al aficionado.
El primer objetivo de Joan Laporta debe ser dar inicio a una reconstrucción total del club. Partiendo de encontrar la financiación necesaria para que el Barça vuelva a la normalidad, el presidente tendrá que firmar un crédito que ya tiene virtualmente concedido la entidad y que permitirá la liquidez necesaria para pagar nóminas.
A partir de ahí, el FC Barcelona tendrá tapar un agujero financiero importante, que asciende a 1.173 millones de euros (730 a corto plazo). La intención debería ser convertir esa deuda en algo a medio/largo plazo y así tener tiempo para poder trabajar.
En lo deportivo, Joan Laporta tiene ante sí la papeleta de convencer a Leo Messi para que no se marche. El futuro del argentino en el club blaugrana está en el aire y el nuevo presidente debería cerrarlo cuanto antes. De hecho, la continuidad del astro ayudaría también en lo económico a un FC Barcelona que podría usarlo como reclamo financiero.
El banquillo del Barça supone el primer gran dilema para Laporta, que tiene que elegir entre ir de la mano de Ronald Koeman o buscar un nuevo entrenador en el mes de junio. El actual técnico tiene un año más de contrato y no querría marcharse del equipo, pero todo dependerá del rumbo que tome éste en la nueva etapa presidencial.
Más allá del fútbol, Laporta debe poner atención en el baloncesto y fortalecer la sección. La llegada del entrenador Sarunas Jasikevicius y el fichaje estelar de Pau Gasol hacen del equipo uno de los favoritos en la ACB y la Euroliga, por lo que explotar sus posibilidades sería una buena manera de fortalecer la sección. Además, el fútbol femenino ha encontrado un modelo exitoso que podría trasladarse a otras secciones del FC Barcelona.
Por último estaría también la renovación del Camp Nou. Los socios aprobaron en 2014 un proyecto para llevar a cabo las obras en el viejo estadio, pero nunca llegaron a dar comienzo. Laporta podría ser el encargado de recuperar dicha iniciativa.